De otros lados (capítulos prescindibles)

SHOOT.

Si fuera linda (momento de debilidad) me puse nerviosa.

'[...] La idea es que la realidad, aceptes la de la Santa Sede, la de René Char o la de Oppenheimer, es siempre una realidad convencional, incompleta y parcelada. La admiración de algunos tipos frente a un microscopio electrónico no me parece más fecunda que la de las porteras por los milagros de Lourdes. Creer en lo que llaman materia, creer en lo que llaman espíritu, vivir en Emmanuel o seguir cursos de Zen, plantearse el destino humano como un problema económico o como un puro absurdo, la lista es larga, la elección múltiple.

Pero el mero hecho de que pueda haber elección y que la lista sea larga basta para mostrar que estamos en la prehistoria y en la prehumanidad.

No soy optimista, dudo mucho de que alguna vez accedamos a la verdadera historia de la verdadera humanidad. Va a ser difícil llegar al famoso Yonder de Ronald, porque nadie negará que el problema de la realidad tiene que plantearse en términos colectivos, no en la mera salvación de algunos elegidos. Hombres realizados, hombres que han dado el salto fuera del tiempo y se han integrado en una suma, por decirlo así... Sí, supongo que los ha habido y los hay. Pero no basta, yo siento que mi salvación, suponiendo que pueda alcanzarla, tiene que ser también la salvación de todos, hasta el último de los hombres. Y eso, viejo... Ya no estamos en los tiempos de Asís, ya no podemos esperar que el ejemplo de un santo siembre la santidad, que cada gurú sea la salvación de todos los discípulos[...].'

-Vos tenés que ocuparte de tus asuntos, no dejarlos por otros. Porque así siempre que pasen estas cosas vos vas a dejar de hacer lo tuyo para sufrir por lo ajeno.

Sabés que hoy no me bañé, no tenía nada de ganas, realmente quería desaparecer del mundo ayer a la noche.

-Evadís tus cosas. Por eso no podés hablar de tus cosas acá, porque son cosas que no querés contar.

-No es que no las quiera contar, no me salen todavía.

Y no me saqué el negro de las uñas, las tengo asquerosas. Desde que fui a lo de Camila que las tengo, qué roñosa.

-Bueno, a eso me refería. Es como que estás enredada, absorvida en los quilombos ajenos. Vos sabés que por la boca se dicen lindas cosas, amor y flores pero también se puede escupir..

-Toda la mierda, sí ya lo sé.

YA LO SÉ!

-Entonces así seguís y no puede ser más así. Tu inconsciente está como atrapado por otras cosas que no te dejan ver las tuyas.

Y a los gauchos compañeros en este baile, les ofrezcooo, respetoooooooo.

Angustia, tiempo, distancia.. paciencia.

-Por qué tenés dos veces el anticristo?

-De eso mismo hablaba, estamos hablando de otra cosa y me saltás con ese libro. Qué sé yo, creo que lo compré de vuelta porque pensé que no lo tenía.

Bueno bueno, no te enojes. También tenés así habló zaratustra. Muchos de Feinmann, de filosofía. Cómo me gustaría un día saquearte la biblioteca, o que seas una buena persona y me los prestés todos.

-Ibas a escribir, por qué no escribiste? Por lo que pasó anoche. No podés dejar que eso vuelva a suceder, tenés que separarte de eso y preocuparte por vos un poco.

Igual con eso que te dije lo único que quería era que me lo prestes, ya que lo tenés repetido. Mala persona.

-Bueno, pero seguime contando, cómo termina todo?

-Se mueren todos, hasta vos.

EXIJO RESPETO

Una hoja en blanco. Esperandome a que yo le cuente mis grandes hazañas, o mis grandes fracasos. Esta pobre hojita va a tener que sufrir mi sangre corriendo por sus renglones, mis vivencias transpapeladas. Mi ayer, hoy y esperado futuro. Lo que no sabe esta hojita, es que si mi sangre no llegara a correr bien por sus renglones, mis vivencias no se transpapelan y mi ayer hoy y esperado futuro mueren en esa hoja, d e s a p a r e c e n.

Es horrible cuando alguien te habla contándote todo lo que pasó, y no tenés ni la menor idea de qué mierda decirle porque nada va a hacer que su situación mejore, y sobre todo si no sos buena consolando (como es mi caso). A veces pienso que es mucho mejor solamente escuchar, pero después pienso que no, que es mejor hablar, pero hasta qué punto? Yo sinceramente, no suelo hablar de mis cosas más intimas o de mis sentimientos, dependiendo con quién estoy hablando, obviamente.. Pero si lo hago prefiero que no me digan nada, no pretendo obtener una respuesta, no lo cuento tampoco para eso, siempre es un lapsus de querer decir lo que me pasa pero después es un arrepentimiento porque verdaderamente hay cosas que no me gusta contar, pero siempre está el inconciente de por medio. Qué mierda estoy diciendo? No tengo idea, tampoco sé qué hago poniendo esto en el blog. La cosa es que hace como un día que vengo con un tema. Y perdoname, no puedo hablar con vos, sinceramente no sé qué decirte, no creo que mis palabras sirvan para nada pero tampoco mi silencio, sólo necesito un medio para expresarme. Odio que siempre me pase lo mismo cuando suceden éste tipo de cosas, y no sólo con cosas graves si no cuando simplemente la gente me cuenta cosas que siente que son profundas o sinceras o que le preocupan, yo me quedo callada.

-Estás muy callada hoy

-A veces mejor callar que hablar hasta los por codos

Él la está esperando acostado en la cama, mirando el techo, pensando en cómo fue su día; tomarse el colectivo, pedir el boleto, llegar a destino y encima tarde. Trabajar como un robot por 8 horas e irse. Prenderse un cigarrillo camino al bondi, esperarlo y que venga repleto de gente, viajar parado 40 minutos, tráfico, bocinazos, embotellamientos. Eso le rompe demasiado las pelotas.

Él la espera, ella le dijo que se bañaba e iba. Hacía 1 hora y media que le había dicho eso. Él miraba su celular expectante, calculando los minutos que seguía tardando. Ella mientras tanto estaba en su casa, viendo qué ponerse, cómo pintarse, eligiendo los zapatos. Despidiendo a sus viejos y diciendoles a dónde iba. Salió y se calzó los auriculares, iba escuchando Dancing a todo volúmen para que los ruidos de la calle no la molesten. Iba caminando al paso de la música. Eran 10 cuadras, y el día estaba muy lindo.

Llegó, le tocó el timbre. El atendió sin mirarla, para hacerse el ofendido por su tardanza. Fueron a la habitación, ella se sacó la cartera, el abrigo, los zapatos. Se acostó en la cama mirando al techo, el hizo lo mismo.

Y se dijeron: 'Hola'.

Por fin vi a Pez. Fue lo masimo de la life. Me compré una remera re linda, vi a Natas, tocaron una sóla canción que sabía, putos. En fin, qué buen recital la concha de la lora, duró muy poco pero me chupa un huevo. Aguante Pez soquetes!

Hoy me dijeron que vuelva a escribir. Hoy vi un amigo de no lo veía hacía un mes más o menos. Y hoy se puso a hablar de su papá. Totalmente orgulloso y riéndose. Nos contaba cómo había sufrido pero por cada oración de dolor contaba una anécdota graciosa sobre él, a veces referido a la enfermedad, otras hablando de cómo era. Hoy, ahora, en ése momento, me gustó mucho escucharlo, me gustó mucho verdaderamente. Fue un relato tan sincero y amoroso sin llegar al punto de sagro que me pareció una descripción perfecta de un papá. Que sufre pero sigue viviendo el día a día como si nada hubiera pasado. Me gustó tanto que me puse a pensar en mi viejo, y me di cuenta que es lo más. Hablé de mis papás también con él, y yo antes pensaba que no tendría que nombrar tanto a mi viejo, no sé, de pelotuda seguramente.
Me gustó mucho, y me sentí muy feliz de ser su amiga, porque a pesar de que sea un caprichoso, un nacionalista de mierda y a veces se ponga en pesado y todos los tengan como a una roca que no demuestra nada, él pasó por cosas feísimas y aún así vive con ellas. Él es una persona respetable y querible, a pesar de todo lo siento como mi mejor amigo y espero que así lo sea por mucho tiempo, desde el día que me preguntó como si tuvieramos 5 años si quería ser su mejor amiga, descubrí una persona totalmente nueva. Nadie lo conoce en realidad, sólo miran lo que parece ser, y no, Ger es lo más, y realmente éste mes que se fue lo extrañé bastante.
En fin, me puse emotiva (?). Fue lo más.

Cuando se pegue la cabeza contra la pared, ahí la quiero ver. Va a ser todo un espectáculo.

Muchas ganas de escribir y ninguna idea. Un libro recién empezado que no te atrapó del todo, pero antes que estudiar preferís leer eso. Un amigo te pasó una locura de bajar todo a 320, hijo de puta, pero mejor para vos. (Está bueno escribir en tercera persona, es 3era pesrona esto no?). Mañana rendís dos exámenes y estás más tranquila que buda meditando, eso es buena señal? no lo creo. Tenés muchas ganas de cantar, de dibujar, de escribir, de hablar de lo que te pasa. No entendés lo que te pasa en realidad, no lo sabés ni siquiera. Seguís inconforme, con todo lo que te rodea. Lo único que te conforma es una amiga pero sin embargo tenés altibajos y eso te hace pensar en el final. Qué patética que sos. "¿Porqué siempre pensás todo como si fuera a ser el final del mundo en el 2012?" (sin embargo mi atún vence en el 2013, ja ja ja qué graciosa). Esto se va a convertir en una patología.
En fin, está bueno escribirte a vos mismo. Chau.

Se hunde el sol y empieza una vez más
el baile de disfraces
en el que todos somos algo más
y no lo que somos.
Inmejorable oportunidad
para engañarnos
y así poder aguantar un día más
en nuestros cuerpos.
Estuches de alma ya ajados se van.
Palabras que nunca más voy a olvidar,
¡Viven en mí!
Nadie baila, es raro mi compás
lucen perdidos.
Cierren los ojos, esto es para descifrar
con los oídos.
Y suban todos ya al viejo vagón
que vamos lejos
y de aquí sólo se bajarán
cuando sean viejos.
Sin más ilusiones te bajás del tren
pero caminando no podés volver.
Nace, crece, muere, nace.
Nace, crece, muere, nace.

Ella sólo intenta ser feliz, tropezando está. Nadan hoy sus ojos entre el rimel, su mentira ya se hundió en la hiedra.
Ah, si pudiera. Si ella quisiera abrirse del ser y la nada, tal vez podría ver que su Dios está en la adolescencia.
Ya que Dios es un mundo, en el que amar es la eternidad que uno busca, y no lo pienses más, que tu mueca está tan despintada.